3 años de Laudato Sí: no podemos dejar que se agote

 

El Papa nos ha regalado el concepto de Ecología Integral, un concepto que ha permitido una respuesta más holística, que ha convocado a muchas diversidades, muchos actores y que ha permitido que las personas, piensen  y re piensen la forma en cómo estamos construyendo el planeta y su futuro. Hace ya 3 años, que se lanzó al mundo la Encíclica Laudato Sí y sobre ello, han habido muchas reacciones, muchos procesos iniciados, muchas apropiaciones, pero también la necesidad de mayores concreciones.

La Encíclica aporta también una gran novedad: un reconocimiento profundo a las espiritualidades de los pueblos originarios, a su forma de relacionarse con el mundo, y a todo lo que nos enseñan y de todo lo que proponen de aprendizaje para un paradigma de consumo y descarte.

Mauricio López, secretario ejecutivo de la REPAM, nos comparte una apreciación de cómo han sido estos tres años de Laudato Sí, según una mirada internacional, regional, eclesial y misionera.

Para Mauricio, existen algunos niveles de acción, sobre los que evaluar la recepción de la Encíclica de Francisco que habla sobre Ecología Integral y los impactos socio ambientales, culturales, económicos.  En este marco plantea:

  • Una positiva y potente Implicación política pastoral, que reconoce al Papa Francisco como un referente global. A partir, de Laudato Si, se han desarrollado discusiones asociadas a la Cumbre de Partes sobre Cambio Climático, un posicionamiento muy firme del mismo  Papa Francisco en la Asamblea de ONU, ” una incidencia muy impactante y positiva y con buenos resultados”.
  • La encíclica Laudato Si, ha sido muy activa, en el mundo externo a la Iglesia Católica. “Me da pena decirlo, pero muchas veces, quizás más que en la misma Iglesia”. El documento contribuye con mucho elementos al mundo de la ciencia, foros sociales, y ambientales. Plantea novedades.
  • Esta exhortación ha generado también un “Diálogo interreligioso muy sorprenderte en el marco de redes internacionales, en el sistema de Naciones Unidas, con las principales religiones organizadas del planeta, (taoísmo, islam, budismo, y del propio mismo cristiano) buscando poner en marcha acciones más globales del cuidado de la casa común, dialogando con las espiritualidades de los pueblos indígenas.” afirma López.
  • Y un cuarto nivel, es el eclesial, en donde quedan muchos desafíos. En este nivel, “quienes encabezan la misión territorializada de la Iglesia, no ha habido una apropiación para el profetismo, la denuncia. Ha existido poca toma de postura. Podemos ver casos aislados, pero pocos, poca relación con el ámbito medio ambiental”.                                                                                   En la mirada misionera, menciona,  “hay mucha vida, que ha acogido  a la encíclica como su gran bandera. Vemos que las bases que están en territorio y que sufren necesitan un apoyo más valiente de sus estructuras de apoyo, de sus pastores para trabajar en este sentido”.                                                                                                                                                                  La  REPAM tuvo la oportunidad de poner a disposición del pueblo de Dios, la serie radial Laudato Si, que ha servido para llegar a muchos espacios. https://redamazonica.org/multimedia/el-cuidado-de-la-casa-comun/

Para nuestro entrevistado, la encíclica Laudato Si, ha sido muy bien acogida en los niveles más regionales y mundiales como el CELAM, CLAR, Cáritas América Latina, la apropiación de la encíclica en el Dicasterio  para la Promoción del Desarrollo Humano Integral, de una manera muy activa, muy actuante.

Al pasar ya 3 años del haber recibido Laudato Si, lo que queda como preocupación, para Mauricio López, es que  el momento estratégico se está agotando. Y nos deja la inquietud de una necesidad urgente de desarrollar una pastoral especializada y sistemática, que pueda aterrizar la propuesta, “para poder darle un vehículo para la apropiación y aterrizaje,  necesitamos una pastoral territorializada, que responda a los desafíos de ecología integral”. concluye.

19/06/2018