Obispos amazónicos reafirman misión pastoral y compromiso con ecología integral

Más de 90 obispos, sacerdotes, religiosas y laicos de 76 jurisdicciones eclesiásticas y comunidades religiosas que conforman la Panamazonía en la región concluyeron este miércoles 20 de agosto su encuentro en la sede del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (CELAM), en Bogotá, con un mensaje final lleno de esperanza, memoria agradecida y llamados a profundizar en una Iglesia con rostro amazónico.

Por: Equipo de comunicaciones CELAM

En el pronunciamiento, los prelados expresaron su gratitud por los frutos que ha dejado el Sínodo para la Amazonía, así como por el acompañamiento del Papa León XIV, quien los animó a continuar en la misión evangelizadora, la defensa de los pueblos y el cuidado de la Casa Común. Los obispos reconocieron los pasos dados en la articulación pastoral, la formación de agentes y la conciencia creciente en torno a la ecología integral y la defensa del territorio. Destacaron el testimonio de comunidades que, incluso arriesgando su vida, resisten a las amenazas contra sus tierras y sostienen la esperanza de los pueblos originarios.

Pese a todo ello, hicieron notar sobre las resistencias internas que aún se ven, como el temor a los cambios, la permanencia de actitudes clericalistas y la falta de audacia para llegar a las periferias. En ese sentido, hicieron un llamado a superar estas ataduras y a vivir a profundidad el espíritu profético que debe caracterizar a la Iglesia.

Compromiso con los pueblos y la tierra

En el mensaje los obispos son enfáticos en afirmar que la Amazonía no es un “territorio de sacrificio”, sino un espacio habitado y amado por generaciones, donde Dios se manifiesta en la vida de los pueblos y sus culturas. En este sentido, los obispos manifestaron su compromiso con todo el tema de la ecología integral y el cuidado de la creación, señalando con urgencia que la crisis climática exige respuestas concretas y solidarias. Los prelados insisten en la urgencia de caminar de la mano con las comunidades, compartiendo sus alegrías y sufrimientos, aprendiendo de su fe sencilla y reconociendo la riqueza de sus espiritualidades. “No estamos por encima ni aparte, sino al lado”, señalaron, insistiendo en ser una Iglesia que acompaña y se deja acompañar.

CEAMA, signo de esperanza

Al hacer un balance del encuentro, los pastores ratificaron que la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) ha ido creciendo en su acción pastoral, consolidándose como un espacio de comunión, discernimiento y misión. Por lo anterior, expresaron su deseo de fortalecer esta instancia eclesial con acciones concretas como son: potenciar la formación de seminaristas, religiosos y agentes pastorales, y buscar modelos de sostenibilidad económica que permitan una pastoral más sólida y cercana. Al concluir su mensaje, los obispos expresaron su gratitud al CELAM por la acogida en estos días de encuentro y confiaron sus compromisos a la intercesión de María, Madre de la Amazonía, pidiendo su protección para continuar caminando como Iglesia sinodal y esperanzada.

Concluye en Bogotá encuentro histórico

El pasado miércoles, en el Palacio Arzobispal de Bogotá, se realizó la rueda de prensa de cierre del Encuentro de Obispos de la Amazonía, que del 18 al 20 de agosto congregó a más de 90 obispos de 76 jurisdicciones eclesiásticas de la región, junto a representantes de la CEAMA, entre ellos líderes indígenas, religiosos, religiosas y laicos que estuvieron aportando a la reflexión. El encuentro, celebrado en la sede del CELAM, analizó de manera detallada los desafíos pastorales, sociales y ambientales de la región, destacando como ejes centrales la sinodalidad, la defensa de los pueblos originarios, el cuidado del bioma y el compromiso de la Iglesia de acompañar la vida en este territorio decisivo para el planeta.

Cardenal Pedro Barreto: una Iglesia amazónica más unida

El cardenal Pedro Ricardo Barreto, presidente de la CEAMA, destacó que por primera vez en la historia se reunieron todos los obispos amazónicos. Explicó que el territorio comprende más de 7,5 millones de km², con 340 pueblos indígenas y numerosas comunidades afrodescendientes, ribereñas y campesinas. Además, indicó que la Iglesia católica está presente en 105 jurisdicciones eclesiásticas de este vasto bioma. Además, agradeció a los obispos haber aceptado esta invitación y añadió que el encuentro renueva el compromiso de anunciar el Evangelio en diálogo con las culturas originarias, al tiempo que enfrenta los efectos del cambio climático y la deforestación. Algo especial que destacó, fue el gesto simbólico de recibir un pectoral elaborado con madera de árboles arrasados por incendios forestales en Bolivia, como signo de unidad y de compromiso con el cuidado de la creación.

Patricia Gualinga: escuchar al bioma y a los pueblos

La lideresa indígena Patricia Gualinga Montalvo, vicepresidenta de la CEAMA, resaltó que esta asamblea fue una experiencia de sinodalidad, donde los obispos pudieron escuchar la voz del bioma amazónico y de sus pueblos. Mencionó que las amenazas diarias contra los territorios ancestrales —deforestación, criminalización, violaciones a los derechos humanos— siguen afectando de manera permanente no solo a las comunidades, sino a toda la humanidad. Asimismo, advirtió que la Amazonía actualmente se encuentra en un punto de no retorno debido a la crisis climática que el mismo ser humano está provocando, lo que señaló que esto exige respuestas urgentes de la Iglesia y de la sociedad. Para ella, el encuentro permitió descubrir realidades comunes y al mismo tiempo la gran diversidad del bioma, motivando a caminar juntos en la defensa de la vida y en la evangelización inculturada.

Cardenal Michael Czerny: la Amazonía, un don de Dios

Por su parte, el cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, tomó la vocería para felicitar a la CEAMA por la iniciativa y el éxito de la reunión. Hizo mención que, la Iglesia lleva más de diez años articulando una respuesta común a los desafíos amazónicos, comenzando con sus pueblos y extendiéndose a la defensa de la naturaleza. Igualmente, observó que las jornadas de estos días sirvieron como un momento de maduración para la CEAMA, que se consolida como un organismo al servicio del pueblo de Dios en la Amazonía. Manifestó su deseo para que los frutos se hagan visibles en la vida de las comunidades y que los medios puedan multiplicar este deseo y reconocer cómo la Iglesia sigue acompañando el gran don de Dios que es este bioma.

Mons. Zenildo Lima: la sinodalidad como signo de esperanza

Para Mons. Zenildo Lima da Silva, vicepresidente de la CEAMA, este encuentro fue una gran señal de esperanza en medio de un contexto marcado por la violencia y la explotación del territorio. Fue enfático en señalar que la Iglesia ha recorrido un camino de nuevas relaciones de cuidado y cercanía, donde la sinodalidad se vive de manera concreta en diócesis, prelaturas y vicariatos. Además, destacó que los obispos trajeron consigo los testimonios de sus iglesias locales, confirmando que el Sínodo para la Amazonía de 2019 sigue siendo una realidad que permanece viva. Señaló que, pese a los grandes desafíos, la experiencia del encuentro trajo la convicción de que la Iglesia amazónica es fuerte y capaz de ofrecer signos de novedad, consuelo y alegría para sus pueblos.